El Agradecimiento
El Islam indica claramente que debemos ser agradecidos con los favores recibidos. En primer lugar, con nuestro Creador, Alá, por todo lo que nos ha dado, lo cual se repite constantemente en el Sagrado Corán. Por eso, el musulmán cuando recibe un favor de Dios, o cuenta una Gracia recibida, incluye la frase Al-Hamdulilah (agradecimiento a Dios) que es una de las invocaciones preferidas.
También debe agradecer a sus semejantes que le han hecho un favor, cuando lo ha solicitado o cuando lo ha necesitado. No debe olvidarse de los favores recibidos ni de quien se los ha hecho y corresponder en la medida de sus capacidades, si se presentare la ocasión.
En Occidente, las personas están acostumbradas a pedir favores; a aprovecharse permanentemente de las ayudas o de las atenciones y cuando se les solicita algo se esconden, no corresponden, se olvidan de los favores recibidos y hasta llegan a hablar mal de quienes se los hacen. Muchos hasta creen que es Jesús el que ha obligado al que hace algún favor. Esto es definitivamente anti – Islámico.